Aunque esta guía está dirigida especialmente al colectivo de bomberos, también es de gran importancia para otros grupos de trabajadores que pueden estar igualmente expuestos a condiciones de trabajo similares como agentes forestales, trabajadores de emergencia, etc.
En los incendios se generan productos de la combustión asfixiantes, irritantes, tóxicos, carcinógenos y mutagénicos. La evidencia científica del daño para la salud de los bomberos de estos productos es enorme, pero recientemente se ha prestado atención en la absorción dérmica, y no sólo en el riesgo por inhalación de humo de los incendios. Se presenta en esta guía parte de la evidencia científica más reciente sobre las vías de entrada de estos cancerígenos en el organismo, demostrando que los trajes de fuego usados hoy en día no impiden la entrada de las sustancias hasta la piel.
En la guía se facilita un método de organización del trabajo configurado para prevenir la exposición de los bomberos a sustancias tóxicas y cancerígenas, basado en los trabajos de investigación y en la experiencia realizada en Europa y en otros países. En general, los contaminantes se encuentran en los incendios a los que acuden y es en estas intervenciones, donde esos contaminantes quedan impregnados en los equipos, trajes de fuego, Equipos de Protección Individual (EPIs), vehículos, etc., trasladándose posteriormente al parque, quedando todo contaminado y formándose un círculo de contaminación.
Esta Guía ha sido elaborada por la Secretaría de Salud Laboral de CCOO de Madrid.